“Pasé lo que muchas pasan a diario”
VIVIR CON MIEDO

"Pasé lo que muchas pasan a diario": el dramático relato de una chica que debió caminar sola, de noche, por calles de Morón

Eran cerca de las 8 de la noche y Sofía se quedó sin carga en la SUBE, en vez de tomar el colectivo, tuvo que irse caminando hasta la casa. Un hombre la siguió en auto. Pudo huir, radicó la denuncia y contó lo que vivió en Facebook: "El auto se metió de contramano y frenó a mi lado de golpe. Vi cómo el hombre quiso bajarse y lo único que atiné a hacer fue correr..."

Redacción El diario // Viernes 23 de junio de 2017 | 09:19

La vecina Sofía Etulain experimentó el miércoles una situación terrorífica, pero lamentablemente cotidiana para muchas mujeres en las calles de Morón, pero no sólo: pasa a diario en el marco más amplio de esta sociedad machista.

Ella, mujer de a pie, logró huir del hombre que la (per)siguió en su auto y relató lo que pasó, para que no vuelva a ocurrir, para prevenir a otras chicas, para construir alertas colectivas y enfrentar, en red, la amenaza machista.

A continuación, completo, el valiente testimonio de Sofía en Facebook y, luego, el facsímil de la denuncia que formuló ante la Policía:

"Ayer a la tarde salí a ver una película de las que pasan por la Municipalidad, salí a las 19.50 y como no tenía carga en la sube decidí ir caminando a mi casa. Ya era de noche, así que apuro el paso más de lo normal, tomo caminos más transitados para poder sentirme un poco más segura, más acompañada. Estaba volviendo sola. Siempre camino, me gusta caminar a cualquier lado que tenga que ir, pero últimamente no lo disfruto como antes, tengo miedo. De día se pasa, pero por la noche mi corazón siempre late más rápido. Si anoche hubiera tenido crédito en la sube, me hubiera tomado el colectivo, pero no… y tuve que pasar por lo que muchas pasamos a diario.
Era de noche, aproximadamente 20.15. Iba caminando por Balbín, una calle transitada, pero llegando a la calle Tres Arroyos se vuelve una zona fea, por lo que decidí caminar por dentro ya que está más iluminado por ahí, hago una cuadra y vuelvo a doblar, tomando la paralela de Balbín, camino una cuadra, y al mirar a mis costados para cruzar la calle, noto que a mi derecha a una cuadra de distancia hay un auto estacionado con las luces encendidas, ahí pensé “éste auto está para avisarle a alguien que hay una boluda caminando de noche sola. Soy boleta”, de inmediato pensé “quizás si cruzo corriendo y se distraiga un segundo no me vea”, y eso fue lo que hice, crucé corriendo la calle. Caminé menos de media cuadra y escuché cómo un auto arrancaba, aceleraba y frenaba una cuadra más adelante por la calle por la cual yo estaba caminando, en la intersección de dos calles, y se quedó ahí, no dobló ni para la derecha ni para la izquierda, tampoco siguió de largo. De inmediato me escondí detrás de un camión y camioneta que estaban estacionados a mitad de cuadra, me quedé ahí mirando qué iba a hacer el auto y no hizo nada, se quedó frenado en medio de la oscuridad. Decidí cambiar mi recorrido, doblar en la esquina siguiente para ir a la parada del colectivo. Doblé y caminé toda esa cuadra súper rápido, pero el auto lo fue más, se metió de contra mano por esa calle y frenó a mi lado de golpe, vi cómo el hombre quiso bajarse y lo único que atiné a hacer fue a darme vuelta y correr. Sabía que mis piernas jamás le iban a ganar a las ruedas del auto, mi velocidad no podía superar la suya, pero tenía que intentarlo, corrí y a mitad de cuadra veo una persona con una mujer dentro de un auto, les pedí ayuda pero el hombre subió la ventanilla y me decía “no, no, no” en shock, debí asustarlo; pero yo lo estaba más, desesperada busqué por ayuda y vi que en frente había personas saliendo de un colegio, vi una mujer pensé que podría entenderme, le pregunté si podía quedarme con ella que me estaban siguiendo me dijo que si, que ella se quedaba conmigo, en eso veo que varias personas se empiezan a acercar, a bajar del auto y preguntar qué estaba pasando, todos me ofrecieron su ayuda. No sé qué hacían las personas saliendo a esa hora del colegio cuando siempre cierra a eso de las 19, pero les agradezco, porque el auto volvió y al ver a todas las personas se fue…
Todas éstas personas me dijeron de llamar a la policía, que me contactara con mis papas, me ofrecieron pasar al colegio para llamar y tranquilizarme. Un hombre con su hija me acompañó cerca de casa. No sé sus nombres, no sé si les llegará éste mensaje pero espero que sí, les estoy totalmente agradecida, sin ellos no sé qué hubiera pasado de mí.
Era un auto negro, el hombre dentro tenía entre 30 y 40 años, en la parte superior a los costados del baúl tiene las luces, no llegué a ver patente ni modelo del auto. Tengan cuidado los que anden por esa zona… Esto ocurrió en Haedo, pero está sucediendo en todos lados. No es la primera vez que me pasa de ver un auto que estaciona más adelante, desviarme y ver cómo dan vuelta a la cuadra.
No se puede vivir más así, estoy cansada de vivir con miedo, estoy cansada de salir y no saber si voy a volver a ver a mi familia, porque no sé si voy a llegar con vida a mi casa o simplemente si voy a llegar, por no saber si mis seres queridos van a llegar a casa o no.
El “avísame cuando llegues” va para todos, mujeres, hombres, grandes y chicos. En esa zona el domingo, día del padre, a unas cuadras de dónde pasó esto, también desapareció un chico en pleno día.
No se puede vivir más así. Tuve que salir a cargar la sube y tenía miedo de caminar sola, me crucé con dos policías, les comenté la situación con las lágrimas saliendo por mis ojos, con miedo todavía, me dijeron que fuera a hacer la denuncia a dos comisarías. Decidí que no podía perder más tiempo, pero con miedo todavía llamé a una persona que aprecio mucho que por favor me acompañara a hacerlas. Vino conmigo y ya hice las denuncias, en ambas comisarías me las tomaron aunque en una me trataron de paranoica, pero sé lo que viví y sé que no fue una paranoia, de todas formas insistí y me la tomaron.

Anoche no pude cerrar los ojos, no pude dormir; hoy después de hacer las denuncias me sentí más tranquila. Pero sólo ruego que no agarren a ninguna, porque de no ser yo podía, puede y es otra persona, porque en éste momento en que redacto esto y en éste momento en que lo están leyendo a mujeres siendo asesinadas y secuestradas, hay personas desapareciendo. No podemos seguir viviendo así".

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