La derrota le puso fin a las ilusiones de Dep. Morón que recibió goles en contra por primera vez en esta edición de la Copa.

El trámite del partido fue parejo en los primeros quince minutos. En ese lapso de tiempo Morón tuvo dos claras oportunidades para ponerse en ventaja. Un disparo del Rengo Román Díaz  y otro de Javier Rossi  pero en ambas ocasiones se lució el cuestionado arquero Germán Lux.

Luego, de a poco, River se fue adueñando del medio campo, comenzó a tener la posesión de la pelota y generó situaciones de riesgo. Morón casi no llegó al arco Millonario.

En los cinco minutos finales de la primera mitad se definió el destino del partido. River convirtió dos goles en tres minutos, el primero en clara posición adelantada pero el árbitro Mauro Vigliano lo convalidó.

Morón acusó el golpe y se notó. La segunda parte fue distinta, con el resultado a su favor, River esperó a Morón que de a poco fue hilvanando jugadas colectivas pero careció de profundidad ofensiva para llegar hasta Lux.

A pesar de eso hubo un claro penal a Damián Akerman (recién ingresado) que Vigliano ignoró. Sobre el final del encuentro River marcó el tercero. Fue un justo triunfo de River que jugó mejor y fue superior,  pero estuvo manchado por el primer gol que le abrió el camino a la victoria.

Para Morón fue el fin de un sueño, impensado e increíble. Igual, como dijo su técnico Walter Otta: Morón logró algo histórico.

Este equipo está haciendo historia y todavía tiene otros desafíos para seguir haciendo más historia todavía.