La arteria permanecerá cerrada al tránsito en el tramo comprendido entre Villegas y Comisionado Indart, al tiempo que Monseñor Marcón cambia su sentido mientras continúen las tareas.

El nuevo esquema incluye la total prohibición de estacionamiento las 24 horas en las calles Monseñor Marcón (entre Indart y Villegas), Comisionado Indart (entre Marcón y Arieta, sobre mano impar) y Villegas (entre Marcón y Arieta). Desde la Secretaría de Tránsito destacaron que “por Arieta normalmente circulan 164 servicios por hora” por lo que “cualquier intervención en la vía pública afecta al tránsito”. “Estamos tratando de acomodarnos para que todos se sientan beneficiados” añadieron.

La iniciativa, no obstante, está lejos de no generar controversia. Quienes atienden los locales ubicados en Arieta coincidieron en el reclamo: “Nos parece que va a ser contraproducente ya que la gente no va a venir con la periodicidad con que lo hace ahora”.

Otras voces señalan lo contrario: “Los colectivos van a tener sus paradas en la zona y no va a disminuir el caudal de gente porque, si la gente quiere comprar, va a venir igual”. “Quizás sea un problema el tema de los manteros porque se van a poner en la peatonal seguro y eso sí nos va perjudicar a los comercios”.

En tanto, bajo el lema “No a Arieta peatonal”, los comerciantes aseguraban, tiempo atrás, que “el shopping disminuyó el público y esto va a terminar de hundir a los negocios”.

Centro de comerciantes con expectativas

Desde el Centro de Comerciantes de San Justo aseguran que la iniciativa será muy beneficiosa. “Se va a convertir en un polo de atracción para los vecinos”, afirmó el presidente de la entidad, Héctor Gabiani. El dirigente consideró que una vez que esté terminada la obra "se va a convertir en un polo comercial hermoso, ya que va a haber decoración, bancos y plantas. Además, habrá seguridad a cargo de la policía local, porque lo exigimos al Municipio para que cuiden la zona remodelada”.