En la plaza Ravenscroft, en el corazón de Hurlingham, los vecinos pudieron asistir a otra extraordinaria presentación de las Orquesta y Coros Municipales para disfrutar de su música. Así, también fueron de la partida la agrupación de instrumentos autóctonos, de canto popular, guitarra, diversos talleres dependientes de la Dirección de Cultura local, y los ballets de tango y danza folclórica.

Cerca de las 17 horas, fue el coro de niños quienes dieron inicio al evento, quienes demostraron su emergente talento. Luego, el coro estable también se hizo presente e impresionó público asistente con sus imitaciones de pájaros y sonidos de la naturaleza (se destacó el modo en que reprodujeron una tormenta). Por su parte, la orquestita, el programa que forma músicos que provienen de los colegios oficiales del distrito y a quienes se les entrega el instrumento que ejecutan, volvió a ofrecer una conmovedora actuación. Luego, tanto la Orquesta Sinfónica como el Coro de Adultos, que interpretaron piezas clásicas y populares como oberturas de películas y fragmentos de la misa criolla, revalidaron su calidad y demostraron por qué están consideradas entre las mejores agrupaciones del país.

Una vez finalizada cada una de las presentaciones, sus directores, el Maestro Roberto Flores y Diego Pérez, recibieron sendas placas en reconocimiento a su destacada trayectoria y arduo trabajo al frente de dichos conjuntos proyectos.

Como cierre de una jornada festiva, los talleres municipales hicieron una excelente muestra de sus producciones, alternando interpretaciones musicales, vocales  y de danza, que fueron recibidas con gran entusiasmo por parte de los presentes.